Antecedentes:
El primer rey de Castilla Sancho I, a pesar de haber perdido la batalla de Golpejera, reunió a las fuerzas castellanas que habían logrado huir de la batalla contra las tropas de Alfonso VI de León, y en una de las acciones más taimadas y cobardes de toda la edad media. Ataco el campamento leonés de noche, mientras los guerreros dormían, desarmados y agotados tras la batalla y la larga celebración de la victoria.En la edad media este tipo de actos militares eran considerados inmorales e impropios de la nobleza, máxime cuando Alfonso había prohibido a sus alféreces perseguir a los derrotados, a los que ya consideraba sus vasallos.
BATALLA DE GOPEJERA
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Con el rey de León prisionero, pudo entrar sin resistencia en la capital del reino, pero Sancho I de Castilla, tuvo que autocoronar en la catedral de León como Sancho II de León, ya que el obispo de León, fiel aun a su rey Alfonso VI se negó a hacerlo.
Tomada la corte leonesa, encamino su ejercito hacia la leal Zamora, que aun resistía bajo el señorío de Urraca y donde irreductibles guerreros gallegos y leoneses, acudían todos los días para reforzar unas almenas que esperaban ser el ultimo bastión del Reino.
Zamora fue sitiada por las tropas castellanas pero aguanto inconquistable durante siete meses, más de medio año, gracias al oportuno liderazgo de Arias Gonzalo y a la valentía de los zamoranos.
A Sancho no le resultaba tan fácil tomar una ciudad prevenida y pertrechada, como atacar un campamento de gente desprevenida y desarmada.
En Zamora, los fieles a Alfonso VI de León, le estaban esperando.
Y allí en un hábil juego de "doble agente", Bellido Dolfos fingiendo ser un traidor a su gente, aparto a Sancho de su tropa, y lo dio muerte.
Liberando a Zamora de este terrible cerco, y acabando con el ímpetu expansionista del primer rey de Castilla.
Con el rey de León prisionero, pudo entrar sin resistencia en la capital del reino, pero Sancho I de Castilla, tuvo que autocoronar en la catedral de León como Sancho II de León, ya que el obispo de León, fiel aun a su rey Alfonso VI se negó a hacerlo.
Tomada la corte leonesa, encamino su ejercito hacia la leal Zamora, que aun resistía bajo el señorío de Urraca y donde irreductibles guerreros gallegos y leoneses, acudían todos los días para reforzar unas almenas que esperaban ser el ultimo bastión del Reino.
Zamora fue sitiada por las tropas castellanas pero aguanto inconquistable durante siete meses, más de medio año, gracias al oportuno liderazgo de Arias Gonzalo y a la valentía de los zamoranos.
A Sancho no le resultaba tan fácil tomar una ciudad prevenida y pertrechada, como atacar un campamento de gente desprevenida y desarmada.
Y allí en un hábil juego de "doble agente", Bellido Dolfos fingiendo ser un traidor a su gente, aparto a Sancho de su tropa, y lo dio muerte.
Liberando a Zamora de este terrible cerco, y acabando con el ímpetu expansionista del primer rey de Castilla.
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