La flota catalana del Conde de Barcelona, cuñado de Alfonso VII de León, también participo en el bloqueo naval de Almería.
Sus armadas de sesenta y tres galeras y más de cien naves auxiliares de transporte había llegado a Barcelona, comandadas por el cónsul Balduino. Desde allí partieron a Almería.
Con la llegada de las fuerzas del rey de Aragón y conde de Barcelona Ramón Berenguer IV, se intentó una celada para hacer salir a los sitiados. El objetivo se logró parcialmente.
Al acudir las huestes alfonsíes, procedentes del reino de León y de Galicia, se planteó el asalto con mayor vigor. Los genoveses se organizaron en compañías de unos mil guerreros. El viernes 17 de octubre de 1147 los combates fueron intensos y las tropas cristianas irrumpieron en Almería.
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