22 sept 2016

El Beato de S. Isidoro de León.

"Beato. El misterio de los siete sellos" se presentó a modo de primicia en el espacio Ivorypress el 4 de mayo con una mesa redonda donde el diseñador Alberto Corazón y el editor Gonzalo Golpe analizaron algunos trabajos de los alumnos y profesores de la Escuela Superior de Diseño de Madrid. 
El debate sirvió de reflexión común sobre el proyecto de exposición que, con el mismo nombre, se inaugura hoy 22 de septiembre en la Sala de las Musas del Museo de la Biblioteca Nacional.
Visión de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis. Folio 135r

Información práctica de la exposición

Del 22 de septiembre al 22 de enero de 2017.
De martes a sábado de 10 a 20 h.
Domingos y festivos de 10 a 14 h.
Último pase media hora antes del cierre.

Abierto también los lunes:
31 de octubre de 10 a 20 h.
5 de diciembre de 10 a 20 h.
 26 de diciembre de 10 a 14 h.
Sala de las Musas del Museo


llamado Beato de San Isidoro de León por ser la Basílica de San Isidoro de León el lugar donde se encontraba originalmente, o Beato de Fernando I de León y doña Sancha se llama así por el nombre de los donantes, aunque también se le denomina Beato de Facundo por el nombre del copista es una obra del siglo XI. 

En el colofón (f. 316) figura nombre del copista: Facundus scripsit, quien también sería el pintor. No aparece ningún nombre de abad o monasterio, aunque la obra pudo realizarse en un scriptorium altamente especializado; posiblemente Sahagún. La coincidencia del nombre del copista (anteriormente árabe) y el de este monasterio (Santos Facundo y Primitivo), da pie al debate. Los autores que mantienen que el códice se compuso en San Isidoro de León, posiblemente hayan tenido en cuenta que la Basílica se inauguró en 1063, tras construirse en el lugar de la Iglesia de San Juan y San Pelayo; por tanto, la datación escrita por el autor quedaría en entredicho. No obstante, el Laberinto (f. 7r) dedicado a Fernando y Sancha de León, cuyos nombres aparecen en todas direcciones en los 840 cuadrados que lo forman, contiene un marco con seis retratos, lo cual ha conducido a ciertos autores a afirmar que este manuscrito toma las corrientes artísticas centroeuropeas, sobre todo de Reicheneau.
 Otros, sin embargo, lo ubican dentro del grupo de Magio, por el que está claramente influenciado, y de la Biblia mozárabe de León (Williams). 
La Adoración de la bestia. Folio 191v
El códice fue copiado en León en 1047 por Facundo, se cree que en su totalidad, dada la regularidad de la escritura incluso en iniciales e inscripciones mayúsculas. 
El año pasado fue declarado por la Unesco "Memoria del Mundo", el mismo título otorgado a los "Decreta" que acreditan a León como la Cuna del Parlamentarismo.


"Esta ‘joya’ bibliográfica que estuvo en el ojo del huracán hace unos años cuando este periódico sacó a la luz su lamentable estado de conservación, debido al escaso celo con que la BNE trató uno de los manuscritos más valiosos del mundo.
Historia de un escándalo
El Gobierno de Aznar autorizó su préstamo en el año 2000 para una exposición en el Palazzo Venezia de Roma. A los pocos días, una comisión de expertos españoles fue enviada urgentemente a la capital italiana para que retiraran de inmediato el códice debido a que estaba entrando en un proceso irreversible de deterioro, causado por el alto grado de humedad del lugar donde se exponía y las pobres medidas de preservación. De vuelta ‘a casa’, los expertos calificaron de «gravísimo» el estado del códice y emitieron un informe aconsejando no prestarlo nunca más ni autorizar ningún tipo de fotografía o manipulado. Sin embargo, el 22 de noviembre del 2005 la entonces directora de la Biblioteca Nacional, la escritora Rosa Regás, firmó un contrato con el Club Bibliófilo Versol, al que daba permiso para manipular el beato, con el fin de publicar una edición facsímil. Fue un permiso insólito, ya que ninguna biblioteca del mundo consiente una edición facsímil habiendo ya una edición de alta calidad en el mercado.
Coincidencia o no, tras el ‘escándalo’ del códice leonés tanto la ministra de Cultura, Carmen Calvo, como la directora de la Biblioteca Nacional, Rosa Regás, fueron relevadas.
El códice, a diferencia de la mayoría, no se copió para un monasterio. Fueron los monarcas Fernando I y Sancha quienes encargaron la obra junto con otras para convertir San Isidoro en un enclave excepcional. El Beato permaneció en la basílica hasta el año 1572. Después comenzó un largo destierro hasta que terminó en manos de Felipe V durante la guerra de Sucesión. El monarca lo requisó y envió a la Biblioteca Real y, finalmente, pasó a formar parte de los fondos de la Biblioteca Nacional."

Diario de León 22-septiembre-2016 
http://www.diariodeleon.es/noticias/cultura/descifran-codice-leones-mas-enigmatico_1100809.html

Diario de León 13-diciembre-2012
http://www.diariodeleon.es/noticias/cultura/biblioteca-nacional-expone-beato-robado-leon-celebrar-sus-300-anos_653132.html

"La Biblioteca Nacional custodia otras joyas bibliográficas leonesas, como el Códice del Libro Juzgo, de 1058; el Códice exposición de la carta del apóstol Santiago; y la Historia silense, códice del siglo XV. En junio del año pasado, la entonces consejera de Cultura, María José Salgueiro, anunció que reclamaría la devolución del patrimonio expoliado a León y que se encuentra principalmente en el Archivo Histórico Nacional, en la Biblioteca Nacional y en el Museo Arqueológico Nacional. La iniciativa se quedó en una mera promesa."


1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo que ye d'importancia eiquí ye l'espoliu del patrimoniu llionés, esi beato debería estar en San Isidoro, y non en Madrid (Castilla).